
19 Nov Horacio Beamonte
El día de hoy quiero compartirles la historia de este tatuaje.
“Puse el tatuaje de mi antebrazo cuando tenía apenas 18 años;
Era un tiempo en que dedicaba mi vida a tocar con mi antigua banda de death/thrash/power metal, llamada «Ak’bal»; eran momentos en que yo tenía una fe demoníaca, pues me llamaban mucho la atención estos temas y estilo de vida propios del rock…
Ahora, he sido convertido a la fe cristiana y a mis 37 años ese tatuaje ya no corresponde a mí pensar, ni sentir ni creer y es por eso mi deseo de eliminarlo de mi cuerpo…
Desde hace ya dos años he buscado opciones para la eliminación de mi tatuaje, y en Missink he encontrado la solución a mi necesidad y petición, ya que cuentan con la tecnología, el personal y el trato capacitados para esta tarea…
Hoy 3 de noviembre de 2014 empiezo mi tratamiento en la mejor clínica”
«EN MISSINK, NADA NOS IMPORTA MÁS QUE TU PIEL».
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